Consiste en una herramienta de trabajo grupal que facilita el surgimiento de nuevas ideas sobre un tema o problema determinado. La lluvia de ideas es una técnica de grupo para generar ideas originales en un ambiente relajado.
Existen 5 pasos para llevar a cabo el brainstorming:
1.- Definir el objetivo que queremos conseguir.
2.- Definir los participantes, cuánto durará la reunión y recopilar el material.
Ideal una libreta de folios donde poder ir escribiendo ideas, arrancando hojas y pegándolas en la pared.
3.- Introducción al objetivo.
El responsable de la reunión dará información a los participantes sobre el objetivo que se quiere conseguir. Exponiendo antecedentes y otros conocimientos para saber cuál es el punto de partida y qué queremos conseguir.
4.- Se inicia el proceso de generación de ideas:
Se llevará a cabo un proceso de divergencia que consiste en generar todo tipo de ideas que se nos vayan pasando por la cabeza hasta que tengamos la sensación de que hemos agotado todas las vías posibles.
Durante la sesión, el responsable de la reunión o dinamizador ira anotando en la pizarra las ideas generadas por los participantes. El objetivo es investigar todos los puntos de vista posible, dejar volar nuestra imaginación y no poner ninguna restricción. Veremos que, cuando una persona propone una idea, da pié al que el resto de participantes construyan sobre esa idea.
Cuando veamos que ya hemos vaciado nuestra mentes, aún daremos una última vuelta con el objetivo de conseguir más ideas cuando parece que ya no queda ninguna.
Es muy importante que durante la divergencia quede absolutamente prohibido criticar las ideas propuestas por otros compañeros. Todas las ideas, por absurdas que parezcan, deber quedar anotadas. En el caso de que alguien diga alguna de las frases prohibidas, será penalizado.
5.- Selección de ideas:
JUICIO Y CONVERGENCIA.
Es ahora cuando nuestra conciencia debe salir a relucir y debemos seleccionar, razonablemente, las ideas que más nos hayan gustado.
¿Cómo se hace? Por ejemplo, cada participante tiene una serie de “stickers” de los que utilizábamos en el cole. Damos unos minutos para pensar sobre las ideas generadas, y a continuación, uno a uno, nos vamos levantando y ponemos en la pizarra 2 stickers al lado de 2 ideas, seleccionando las que más nos han gustado.
La idea o ideas que más stickers tenga serán las que seleccionaremos para continuar con el proceso.
6.- Iniciamos de nuevo todos los pasos.
Con la idea que más nos ha gustado, volvemos a replantear un nuevo objetivo, realizando el proceso de nuevo, hasta que las ideas generadas sean acciones que ya podemos asignar y poner en práctica.